Además de nuestro propio cuerpo, existen miles de objetos en nuestro entorno que
producen sonidos y nos sirven para hacer música.
A continuación te sugerimos unos ejercicios para que experimentes con los objetos
sonoros que te rodean.
Actividad individual. El sonido de los objetos personales
Entre tus objetos personales (pelotas, llaves, monedas, herramientas, etcétera) intenta
producir un sonido, ya sea golpeándolo con otro o con el piso, pared, mesa, etcétera,
frotándolo, soplándolo. ¿De qué forma producen el sonido? ¿Qué sonidos producen?
Busca también dentro de tu casa objetos que te pueden servir como instrumento.
Experimenta con lo que encuentres. ¡Te puedes llevar sorpresas! Te recomendamos
particularmente la cocina, ya que las ollas y cacerolas son unos instrumentos fabulosos.
Intenta clasificar los objetos que seleccionaste según los siguientes criterios:
Altura: Tono: agudos o graves.
Intensidad: Volumen: fuertes o suaves.
Duración: largos o cortos.
Timbre: “color” del sonido.
Actividad grupal. El sonido del salón de clases
Haz la misma exploración y clasificación con los objetos que encuentren tú y tus
compañeros en el salón de clase: libros, cuadernos, hojas de papel, lápices, reglas,
etcétera.
Una vez que hayas hecho estos ejercicios, con base en las clasificaciones realizadas,
busca una relación entre el tamaño del objeto, el material del objeto, la forma de
producir el sonido, y el sonido producido. ¿Qué objetos producen los sonidos más
agudos? ¿Qué objetos producen los sonidos más fuertes? ¿Cómo se producen los
sonidos más largos?
Como te podrás haber dado cuenta la mayoría de los objetos sonoros sirven
básicamente como instrumentos rítmicos
.
1.2 Conocimiento de los objetos sonoros utilizados como instrumentos en
diferentes géneros y estilos musicales
Como mencionamos anteriormente, desde tiempos remotos, el hombre adoptó los
objetos sonoros que estaban a su alcance como instrumentos musicales. La música
tradicional incluye, aun hoy en día, algunos de estos instrumentos que varían según las
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