SECUENCIA 8
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aprendizaje en forma bilingüe en las comunidades in-
dígenas? ¿O sólo de membrete le pusieron Educación
Bilingüe Bicultural? O Educación Bilingüe Intercul-
tural.
Se llame como se llame, lo raro es que ni los pro-
pios maestros saben escribir en su lengua materna.
Una ocasión, en una reunión de padres de familia, los
maestros comentaron: “Es que la escritura en idioma
tzotzil es muy difícil, ni nosotros hemos podido desci-
frar bien”.
Por un lado también tienen la culpa, porque no se
interesan en conocer y practicar la escritura en lengua
indígena. Y por el otro, es que al sistema educativo así
le conviene; para empezar, las maestras y los maestros
indígenas no todos están ubicados en sus respectivas
áreas lingüísticas: los tzeltales están en las comunida-
des tzotziles o viceversa, los tzotziles están en las co-
munidades tojolabales. Tendrá o no tendrá sus razones
la educación indígena, pero con este revoltijo de do-
centes no permite el desarrollo adecuado de la ense-
ñanza-aprendizaje en la lengua materna de los edu-
candos.
No ha dado comienzo un desarrollo educativo des-
de el entorno cultural indígena dentro del aula escolar
en las comunidades indígenas, porque las lenguas úni-
camente se usan para traducir algunas palabras del
español o para dar órdenes; tales como:
ch’anchanik
(cállense),
chotlanik
(siéntense),
lok’eso avunik
(saquen
sus cuadernos).
La política integracionista nacional ha impuesto
elementos culturales a los pueblos indígenas mediante
el sistema educativo y los medios de comunicación.
Un especialista brasileño decía en una conferencia:
“Ellos necesitan destruir nuestra cultura, destruir la
soberanía del pueblo, porque esto es el papel del
neocolonizador”. Esta política integracionista ha sem-
brado confusiones y muchos padres de familia co-
mentan: “De qué le sirve mi hijo aprender a leer y es-
cribir en nuestro idioma, si lo importante es que
aprenda el castilla, para que vaya a buscar trabajo en
otros lugares o para que vaya a trabajar de maestro”.
Desde aquí comienza la tarea de los promotores cultu-
rales, de los maestros y maestras entregados al desa-
rrollo cultural de su pueblo, al desarrollo de las len-
guas indígenas tanto en la lectura como en la escritura,
a la
promoción
de su uso como un medio de comuni-
cación imprescindible como lo es el idioma español.
Para que los pueblos indígenas sigan su camino, es
más adecuado aplicar el término
desarrollar
que
pre-
servar
; pues
preservar
es “proteger”. Nuestras lenguas
indígenas no necesitan protección, no son un objeto
de museo. En cambio el término desarrollo, según el
diccionario, significa “
progreso cualitativo o durade-
ro… crecimiento de un organismo
”. Claro que el diccio-
nario nos da una definición corta; pero con el desarro-
llo hay mayor acercamiento hacia el crecimiento
dentro del entorno cultural, tomando en cuenta los
elementos heredados de nuestros antepasados.
Los planes y programas deben ser dirigidos por
compañeros indígenas y el resto del personal educati-
vo también debe ser indígena. En ocasiones los traba-
jadores son mayoritariamente hispanohablantes.
La promoción y
difusión
de las lenguas indígenas
no debe ser un simple cumplimiento de compromisos
institucionales y desde una óptica indigenista, sino un
compromiso nacido desde los corazones de cada hom-
bre y mujer indígena para el desarrollo cultural de
nuestros pueblos.
* Domingo Gómez Castellanos: promotor cultural y locutor de radio,
originario de Cruztón, municipio de Chamula, Chiapas.
Fuente: Domingo Gómez Castellanos. “El deterioro de nuestras lenguas,
efecto de las políticas integracionistas”. En
La Jornada
, 20 de septiembre
de 2004 (suplemento
Ojarasca
, Núm. 89).
El texto dice…
2.
Comenten y escriban en su cuaderno las respuestas:
a) Según el autor, la política integracionista en México:
A. Pretende que todos los mexicanos tengamos una sola cultura y una sola
lengua.
B. Fortalece el desarrollo de todas las lenguas indígenas del país.
C. Promueve la creación de espacios públicos para usar las lenguas indígenas.