ESPAÑOL
III
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Y aunque sepas ya quién eres,
y desengañado estés,
y aunque en un lugar te ves
donde a todos te prefieres,
mira bien lo que te advierto:
que seas humilde y blando,
porque quizá estás soñando,
aunque ves que estás despierto.
[Vase.]
SEGISMUNDO
:
¿Que quizá soñando estoy,
aunque despierto me veo?
No sueño, pues toco y creo
lo que he sido y lo que soy.
Y aunque ahora te arrepientas,
poco remedio tendrás;
sé quién soy, y no podrás,
aunque suspires y sientas,
quitarme el haber nacido
desta corona heredero;
y si me viste primero
a las prisiones rendido,
fue porque ignoré quién era;
pero ya informado estoy
de quién soy, y sé que soy
un compuesto de hombre y fiera.
ESCENA VII
Sale ROSAURA en traje de mujer.
ROSAURA:
Siguiendo a Estrella vengo,
y gran temor de hallar a Astolfo tengo;
que Clotaldo desea
que no sepa quién soy y no me vea,
porque dice que importa al honor mío:
y de Clotaldo fío
su efecto, pues le debo, agradecida,
aquí el amparo de mi honor y vida.
CLARÍN:
[A SEGISMUNDO.]
¿Qué es lo que te ha agradado
más de cuanto aquí has visto y admirado?
SEGISMUNDO
:
Nada me ha suspendido,
que todo lo tenía prevenido;
mas si admirarme hubiera
algo en el mundo, la hermosura fuera
de la mujer. Leía
una vez yo, en los libros que tenía,
que lo que a Dios mayor estudio debe
era el hombre, por ser un mundo breve;
mas ya que lo es recelo
la mujer, pues ha sido un breve cielo;
y más beldad encierra
que el hombre, cuanto va de cielo a tierra;
y más si es la que miro.
ROSAURA:
[Aparte.]
(El príncipe está aquí; yo me retiro.)
SEGISMUNDO:
Oye, mujer, detente:
no juntos el ocaso y el oriente,
huyendo al primer paso;
que juntos el oriente y el ocaso,
la luz y sombra fría,
serás sin duda síncopa del día.
[Aparte.]
¿Pero qué es lo que veo?
ROSAURA:
Lo mismo que estoy viendo, dudo y creo.
SEGISMUNDO:
[Aparte.]
(Yo he visto esta belleza
otra vez.)
ROSAURA:
[Aparte.]
(Yo esta pompa, esta grandeza
he visto reducida
a una estrecha prisión.)
SEGISMUNDO
:
[Aparte.]
(Ya hallé mi vida.)
Mujer, que aqueste nombre
es el mejor requiebro para el hombre,
¿quién eres? Que sin verte
adoración me debes, y de suerte
por la fe te conquisto,
que me persuado a que otra vez te he visto.
¿Quién eres, mujer bella?
ROSAURA:
[Aparte.]
(Disimular me importa.) Soy de Estrella
una infelice dama.